lunes, 11 de febrero de 2008

Reynaldo García Blanco (Venegas, 1962)



Emeregildo Reynaldo García Blanco
(Venegas, Yaguajay, Sancti Spíritu, 13.04.1962)

Poeta y ensayista.
.

Es promotor de varios espacios dedicados a la poesía y la literatura. Actualmente dirige el Centro de Promoción Literaria "José Soler Puig" de Santiago de Cuba, ciudad donde reside; y pertenece al consejo editorial de las revistas "SIC" y "El Caserón".

Ha obtenido diversos premios, entre los que se destaca el de poesía de "La Gaceta de Cuba". Posee la Distinción por la Cultura Nacional, es miembro de la UNEAC, y miembro de honor de la Asociación Hermanos Saíz.

Ha publicado entre otros:

  • Larguísimo elogio, 1990, Ediciones Vigía, colección del San Juan.
  • Textos para elogiar a la novia y al país, 1991, Ediciones Luminaria, colección La Verja.
  • Advertencias (in)fieles para escuchar el pájaro de fuego de Stravinsky, 1992, Centro Provincial del Libro y la Literatura, y Editorial Oriente.
  • Perros blancos de la aurora, 1994, Editorial Oriente.
  • Abaixar las velas, 1994, Editorial Oriente, y Pinos Nuevos/ Editorial Letras Cubanas.
  • Reverso de foto & Dossier, 2000, Casa Editora Abril.
  • País de hojaldre, 2004, Editorial Letras Cubanas.
  • Campos de belleza armada, 2007, Ediciones Unión.

( Direcciones de correo electrónico: regabla@cultstgo.cult.cu, centrosoler@cultstgo.cult.cu )


REVERSO DE FOTO

Amigo
Está por acabarse el siglo
Y me gustaría que vieras esta foto
Antes que los copos de nieve y sangre
Borren de por siempre esas noticias

De izquierda a derecha
Con una mirada de ángel hay una mujer con bigotes ella es Frida Khalo y su mano reposa sobre el hombro de un tal Trotsky (que se lleva a los ojos una manzana) luego hay una columna dórica (ahora está sepia pero en el momento de la foto era roja). Le sigue un hombre con un cocuyo en la mano y un tabaco en la boca (hace círculos de luz para que veamos en esta oscuridad) y parece darle la espalda a una niña que se llama Greta Garbo (ella juega con un papalote y esa mano que sale de la nada en un ademán de arrebatarle el juguete es salvador Dalí. Muy al fondo puedes leer un cartel que dice “proletarios, de todos los países Uníos” hacia el extremo derecho un hombre agrega con un pincel “Último Aviso” la memoria me falla pero me jugaría la vida que es Pablo Picasso. Le siguen otras personas que a juzgar por las vestimentas son cuáqueros y rusos o chechenios sabe dios. Sobre la mesa hay cebollitas búlgaras y unos vinos René barbier Rosado. La muchacha y el viejito son maría Kodama y Jorge Luis Borges. El que se está bajando de la cruz es Jesús. La del traje de enfermera de la II Guerra Mundial es Isadora Duncan. El que le pide a lenin una mano para aplaudir es Valle Inclán y ese de mirada tenue que tiene un las manos un disco de los vétales es Mao Se Tung
Amigo mío
Está por acabarse el siglo
Y me gustaría que vieras esa foto
Aunque los copos de nieve y sangre
Borren de por siempre estas noticias aunque lo más importante es que recuerdes que esto fue hace tiempo cuando no éramos de dos bandos y había cebollitas búlgaras y unos vinos René Barbier Rosado y un hombre con un cocuyo en la mano y un tabaco en la boca.

(del libro REVERSO DE FOTO & DOSSIER, Casa Editora Abril, 2000)



FOTO DE FAMILIA

Teníamos un aljibe
y más paciencia para buscar en el mapamundi
un lugar llamado Kosovo

teníamos el reino
y la lealtad

No había un escudo
Alguien que regara las plantas del jardín
Y jugara con os niños del vecino.

Eso fue.

(del libro PAÍS DE HOJALDRE, Letras Cubanas, 2004)



NO MORIR HASTA HABERLO VISTO TODO

Mi mujer cantando Alfonsina a las diez de la noche
Unas muchachas recostadas a los médanos
Un poeta robándose las obras completas de Severo Sarduy
Tres prostitutas en Medellín que me confunden con un nicaragüense
Un ciego de espaldas al mar
Fayad Jamis leyendo El ahorcado del Café Bonaparte
Una librería con todo Borges y Los alimentos terrestres de Gide
Un pingüino muerto en las costas de Talcahuano
Otra vez mi mujer haciendo pajaritas de papel
Mi madre tendiendo unas sábanas blanquísimas
Un policía leyendo a Rainer María Rilke
Thiago de Melo y María de Aparecida preguntándome por Cuba
Mi padre a punto de morir bebiendo té con bergamota
Una mesa llena de uvas negras y otras ambrosías desconocidas por mí
Tres mendigos sonrientes en la Avenida paulista
Dos revistas Orígenes en la Librería Renacimiento
Unas vacas nadando en el mar de Manzanillo
Un tren francés roto en las llanuras de Camagüey
Un vendedor de agujas con poemas publicados
Un ciervo herido que busca en el zoológico amparo
Mi hermana a la salida de un quirófano
La Plaza de la Revolución vacía y oscura
Los muros del Moncada a las tres de la tarde y en agosto
Esto he visto yo y espero no morir hasta haberlo visto todo.



PAYASO

................................................................................A Oscar Cruz y familia

No vino a la fiesta
Nos quedamos esperando su nariz
sus pantalones color del cielo
Los niños se cansaron
dibujaron las paredes con hojaldres y melancolía
¡Tal vez si hubiera cobrado por adelantado!
¡Tal vez!
En nuestra saga familiar nunca había pasado
ha sido la debacle
lo nunca visto
Nadie se atreve a mostrar las fotos
todos se van por la periferia
No vino
Su risa resuena allá afuera en el patio
como en otro tiempo
como en otra fiesta
como si no fuera un payaso.



VIRGIN ISLANDS / TÉ CLASICO

.................................................................................A Mirna Figueredo Silva

No es sabor de té en los labios de Marcel Proust
o el aroma en la memoria

Los feroces chocolates de un día
las tiendas imposibles de importar
o frutas que ya no existen

Es un Virgin Islands a las tres de la tarde
jarra azul de porcelana

Mirar el país desde un cuarto piso
notar que no estás

Paladeo el amargor que sube
que se extiende por la sala y los libros

Se dibujan cruces en el cielo
tal vez llueva como Dios manda me digo
Virgen Islands té clásico para recordarte.



RÍOS

Por los ríos de mi país no se puede navegar
ni río arriba en busca de nativas
ni río abajo en busca de oro

En las desembocaduras hay peces cárdenos
pescadores ciegos con varas de mimbre
mariposas de óxido

Por los ríos de mi país
no andan Gilberto Girón ni José Jacinto Milanés

Los ríos de mi país se han quedado quietos
sobrecogidos

Yo les canto desde la podredumbre.



YO VI TU CASA ENCENDIDA

Yo la vi
fue en los albores de junio
veníamos con el país a cuesta
en los jardines devastados caía la noche
se podía escuchar el fragor de las tejas francesas
el estallar de las vicarias
los sobresaltos del hedor
la pleitesía de los muros

Yo vi tu casa como una zarza
como árbol de fuego
como un dictamen de muerte y esplendor
sin más existencia que la nulidad

Tu casa en bandolera
barranca abajo
cuesta arriba
deleite de la memoria

Era junio
muy al principio de los desastres.

viernes, 1 de febrero de 2008

Caridad Atencio (La Habana, 1963)

Caridad Elvira Atencio Mendoza
(La Habana, 14.02.1963)

Poeta, ensayista e investigadora.

Es Licenciada en Filología por la Universidad de la Habana en 1985. Trabaja como investigadora del Centro de Estudios Martianos desde hace 17 años, donde ostenta la categoría de investigadora auxiliar y miembro del Consejo Científico de esa institución.

Ha publicado los poemarios:
Los poemas desnudos; Ediciones Mucuglifo, Mérida, Venezuela (1995); Reina del mar editores, Cienfuegos (1997).
Los viles aislamientos, Editorial Letras Cubanas (1996).
Umbrías, Editorial Letras Cubanas (1999).
Los cursos imantados, Ediciones Unión (2000).
Salinas para el potro, Ediciones Extramuros (2001).
La Sucesión, Editorial Letras Cubanas (2005).
Notas a unas notas para L.A., Ediciones Unión (2005).
El libro de los sentidos, Editorial Letras Cubanas (2010).

Y los libros de ensayo:
Recepción de Versos sencillos: poesía del metatexto; Editorial Abril (2001).
Génesis de la poesía de José Martí; Editorial del Centro de Estudios Martianos y Universidad Estatal a Distancia de Costa Rica (2005).
Circulaciones al libro póstumo; Editorial Oriente (2005) - Ganador del Premio Razón de Ser de la Fundación Alejo Carpentier en 2003.
El mérito de una solicitud misteriosa: De algunos poetas románticos mexicanos en Martí; Instituto Mexiquense de Cultura, Toluca (2005).
Un espacio de pugna estética. Ediciones Matanzas, Matanzas (2006).
La saga crítica de Ismaelillo. Editorial José Martí.La Habana (2008).
Del agua refluyente: sobre los versos de La Edad de Oro. Ediciones Matanzas (2011).

Ha sido antologada en diversas selecciones, entre ellas en el Álbum de Poetisas Cubanas, prólogo y muestra poética de Mirta Yáñez; y ha publicado en todas las revistas de prestigio literario cubanas, y en revistas de Estados Unidos, España y México.

Por su obra ha sido distinguida con:
• Distinción por la Cultura Nacional.
• Premio Pinos Nuevos de Poesía en el año 1996.
• Premio Calendario de Ensayo en el año 1999.
• Premio Dador de Ensayo en el año 2000.
• Premio Dador de Poesía en el año 2002.
• Premio de Poesía de la revista La Gaceta de Cuba de la UNEAC en el año 2005.
• Premio de la Crítica 2010 (otorgado en el 2011 por "El libro de los sentidos").

( Dirección de correo electrónico: atenciocary@gmail.com )

 

CELOSIAS

Sobre el cruce fugaz de dos siluetas
la calma del que morirá primero.

Abismos en la cáscara del fruto.

Un movimiento tácito en la sombra.

Valor como un castigo,
obligación convertida en deseo.

No le tomo al vacío.

Son los aires del cúmulo

El fuego que mirabas…

Sólo el peso del tiempo crea un latido sordo en mi cerebro.


LA TRAVERSËE DIFFICILE

1 Las maneras de ver el descalabro
por la mirada oblicua,
distendida.

Se respira la inercia del maniquí aterrado.


2 Casi en la superficie
la mano fue tensada cuando apretaba el fruto.

Desde Isidore toda mesa anuncia disección.


3 Se respira la inercia del maniquí aterrado.
Es la venta.

Es la muerte sagrada de los ciclos.


4 Los andamios que portan la mirada
sin proyección van al punto de apoyo.
El juego torvo de las poses, la escalera,
el descalabro encima

El espíritu flota balaustrado.



ooOoo

Cimentar por abuso
signar reimposiciones.

El fuego se alimenta
de lo que crea en lo que destruye.

Estoy leyendo a los maestros.

Pateo una naranja.



ooOoo

Me habían amarrado a una camilla. Para mí ciego era el motivo. La prisa nunca me concedió. Me gobernaba un filo. Así lastimaron un cuerpo muerto. Hinché con agua mis facciones hasta dejarlas limpias. Sin desearlo tuve que verte. La serpiente de dos colas tiene una sola cabeza.


ooOoo

En la celda de la interpretación intento describir de mi cerebro el molde. Con mis temores aún todo transcurre. La luz se aferra. En el fluir presiento. Me alcanzaban la sal sin que los viera. Vástago de la noche, amo el rostro de un cadáver podrido.



ooOoo

De donde están proseguir las relaciones. Si actúas como siempre, te incrimina. Si finges, conoce de tu error. Te alejabas sin culpa, marcándote la piel para verla crecer. Miro mi sacrificio en la imaginación helada. Su castigo lo clava contra mí. Se ve la profecía. Demorada en lo oscuro y mi sombra persigue a mi sombra. No cortaría algo si no fuera estrictamente mío.



ooOoo

Como tú ‘conseguía al amado mediante la equivocación absoluta’. La habitación es el espacio del país de mi cerebro. Hacia dentro la apariencia vidriosa se congela. Hacia dentro la estructura sinuosa es un cuchillo. Estoy en un paisaje idéntico al mío y quiero regresar. Se atenaza en la mente el esfuerzo olvidado. Así, atrapada en un vacío de carne involuntaria, hecho de la sustancia oscura de mis venas, lanzo una enorme red. Me abro en el fuego.



ooOoo
 
Huye de las ventanas demasiado perfectas, los destinos, la cadena, aunque parezca demasiado larga. Huye de ti. Con naturalidad tu rostro entraba en ángulos deformes. El tiempo tiene su ritmo. Desenmascara la obstinación social el carácter biológico de la vida. Una quemada en forma de mariposa. Que los pensamientos se cumplan espontáneamente.


ooOoo

Darle a este tiempo lo que ese tiempo lleva. Ardía por el tramo del ansia hasta este repicar del hecho indiferente. ‘No le pidas tú a la inmensidad’. Lo que ocultaban para ser mostrado, aferrados al adiós infinito. ‘Una hoja permanentemente afilada pierde su filo’. Solo y sin máscara arrancaba tus armas desgarradas.



ooOoo

Lee con sangre: tu rostro hinchado por el desdén. El instante cuando la muchacha se seca. Arrancar un pedazo de párpado para ver. Hincaba esto que dejo. El obstáculo te permitirá avanzar. ¿No me ven sin mi ojo? Afuera el mundo es demasiado cruel para ti que has nacido en cautiverio.